“Necesitamos reformas electorales que posibiliten elecciones libres y transparentes”
Monseñor Rolando Álvarez analiza la separación entre la Alianza Cívica y la Unidad Nacional Azul y Blanco, insiste en que todos los sectores deben buscar el consenso y apela por reformas electorales integrales.
- enero 14, 2020
- 06:17 AM
- Despacho 505
- Copyright Despacho 505
Monseñor Rolando Álvarez analiza la separación entre la Alianza Cívica y la Unidad Nacional Azul y Blanco, insiste en que todos los sectores deben buscar el consenso y apela por reformas electorales integrales.
La separación entre la Alianza Cívica y la Unidad Nacional Azul y Blanco (UNAB) resuena en los oídos del obispo de Matagalpa, monseñor Rolando Álvarez, y por más vuelta que le dé, asegura no entender el contenido de esa estrategia.
Incluso, ha llegado a la conclusión que por más que lea el comunicado de separación, sigue sin comprender a las dos organizaciones, e ironiza que es necesario realizar un análisis gramatical.
Acostumbrado a su franqueza, monseñor Álvarez asegura que no es tiempo de descalificaciones, ni exclusiones, ni de radicalismos extremos, ni de divisiones, porque el pueblo exige un consenso social que le permita salir de la crisis sociopolítica en la que vive Nicaragua desde el 18 de abril del 2018.
Señala que el principal reto es lograr la unidad de los nicaragüenses, pero también exige reformas electorales serias que permitan que las elecciones generales sean libres y transparentes.
Despacho 505 le realizó una entrevista y esos son sus principales puntos de vistas sobre el contexto actual.
¿Qué futuro le ve a la unidad en Nicaragua, después de la separación de la Alianza y la UNAB que se acaba de dar en estos días?
Yo leí el comunicado conjunto que emitió la Alianza Cívica y la UNAB, ahí están hablando de independencia y autonomía, de roles pero que continúan teniendo la misma finalidad. Honestamente no terminé de comprender lo que quisieron decir y sigo tratando de entenderlo y pues probablemente es que necesite leerlo muchísimas veces y tal vez hasta hacer un análisis gramatical, pero no logro comprender lo que quiso decir la UNAB y la Alianza Cívica. Solo puedo decir entonces que este no es momento de descalificaciones ni de exclusiones, ni de radicalismos extremos, no es tiempo de división, no es tiempo de trifulca, de riñas, no es tiempo de desacuerdos, el pueblo no está para eso. El pueblo quiere que los nicaragüenses todos nos unamos entorno un consenso social que nos permita salir de esta crisis.
Usted ha insistido que existe desconfianza, imposiciones y afán de protagonismo de los dos sectores, ¿habrá posibilidad de lograr consenso en este momento?
En primer lugar quisiera decir lo que a mí la gente me dice en la calle, los campesinos me dicen en las montañas, la gente que la de a pie, la de los buses, están totalmente confundidos y este comunicado, estas declaraciones que estos organismos han emitido, al pueblo no lo tienen para nada contento ni satisfecho. Por otro lado si hay buena voluntad y un básico de respeto a las diferencias y también cualquier grupo de poder sea político, económico, ideológico, social, deponen sus intereses y las personas actúan en total libertad en pro del beneficio mayor y común que es Nicaragua, por supuesto que cualquier organismo, cualquier persona se puede poner de acuerdo con otra.
Funcionarios del régimen de Daniel Ortega han insistido que las reformas electorales las discutirán con los partidos políticos, ¿será más de lo mismo?
En primer lugar tengo que decir, que leí la agenda de la Asamblea Nacional para este año, en principio me llama positivamente la atención que en esa agenda están contemplando un acápite de las reformas electorales, lo vi bastante reducido, pero hay que esperar que es lo que se va a presentar, pero ciertamente lo que el pueblo está necesitando, lo que todos estamos necesitando son reformas electorales que posibiliten un proceso y unas elecciones libres y transparente y con total observación nacional e internacional.
Se aproximan las elecciones y este es un año preelectoral ¿qué rol estará jugando la iglesia en estos procesos para que pueda haber un cambio y una solución a la crisis que vive el país?
Ante todo, solo quisiera decir que si uno se pone analizar los tiempo y toma en cuenta todos los feriados que hay en el país, estamos prácticamente a la vuelta de la esquina, casi que en 10 meses. Estaríamos ya en todo un proceso electoral, de tal manera que estamos en tiempos de iniciar el trabajo de las reformas electorales y pues yo creo que del gobierno, los partidos políticos, los organismos sociales y políticos tienen que buscar un acuerdo que garantice esas reformas serias.
¿Temen que agudice la represión a la iglesia católica, por estar orientando al pueblo a tomar buenas decisiones en medio de este proceso?
Nosotros no estamos en contra del gobierno, nosotros no estamos en contra de nadie, nosotros estamos a favor del pueblo, a favor de Nicaragua, favor de la paz, de la justicia, de la libertad, de la democracia y yo pienso que eso no ofende a nadie.