Premio Libertas Internacional 2024 para el obispo Rolando Álvarez

El obispo de Matagalpa y Estelí, monseñor Rolando Álvarez, fue condecorado con el premio Libertas Internacional, que otorga la Asociación para la Participación de la Sociedad Civil Oviedo21, anunció el organismo este viernes 3 de mayo.

Álvarez fue prisionero político de la dictadura nicaragüense de Daniel Ortega y Rosario Murillo entre agosto de 2022 y enero de 2024, cuando fue desterrado a Roma junto a otros 17 sacerdotes y religiosos nicaragüenses.

Los méritos del obispo nicaragüense, según el fallo del jurado, son las denuncias de Álvarez contra la dictadura de Ortega y Murillo y su compromiso con la paz y los derechos humanos.

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Segundo premio para Álvarez

El objetivo de los premios es reconocer la trayectoria y vida de personajes e instituciones defensoras de la libertad.

Son cuatro categorías: Libertas Oviedo, Libertas Asturias, Libertas España y Libertas Internacional, en la que también fue galardonado anteriormente el opositor venezolano Leopoldo López y la Fundación Internacional para la Libertad, presidida por Mario Vargas Llosa.

Es la segunda vez que Álvarez recibe un premio por parte de una institución religiosa, pues en noviembre pasado, cuando aún era prisionero de la dictadura de Ortega y Murillo, lo condecoró la Confederación de Religiosos y Religiosas (CONFER).

Álvarez recibirá el premio el próximo 29 de mayo, en el auditorio Príncipe Felipe de Oviedo, en España, junto a otros galardonados, como la Fundación Gustavo Bueno, el Foro Jovellanos y la Sociedad Civil Catalana.

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Los crímenes de la dictadura

Álvarez fue condenado a más de 26 años de cárcel después de ser una de las voces más críticas contra la dictadura nicaragüense y fue apresado en medio de la persecución que desató el régimen Ortega Murillo en contra de la iglesia católica nicaragüense.

La dictadura de Ortega y Murillo ha cometido al menos cuatro crímenes de lesa humanidad contra sacerdotes nicaragüenses, desde que en 2022 arreciara la persecución contra la Iglesia católica, restringiendo la libertad de religión en Nicaragua, denunció recientemente el Colectivo Nicaragua Nunca Más en un informe que alerta sobre la profundización de la persecución.

Deportación o traslado forzoso, encarcelación u otra privación grave de la libertad física, tortura y persecución de un grupo o colectividad, son las violaciones a los derechos humanos que califican como crímenes de lesa humanidad que ha perpetrado la dictadura contra sacerdotes.